Vicente Herrera Márquez
Compadezco a la mujer hermosa
que hoy esté conmigo.
Ella no lo sabrá,
pero en mi mente tendrá otro nombre,
en mis pupilas será otro rostro,
en mis labios sabrá a otra miel,
en mis oídos entonará otro canto,
y en mi cama…
y en mi cama será otra piel.
Será susurro, será viento caliente,
sentirá placer de hoy y ahora.
Pero para mí…
Para mi, será un sublime orgasmo de ayer.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario